Por Rubén García Cebollero
Por fin llegó Madrid. Por fin el Círculo de Bellas Artes fue iluminado con la voz, la presencia y la poesía de Laura Fernandez-Mcgregor Maza. Los agradecimientos a las autoridades, de todo tipo, presentes o justificadamente ausentes, son interminables. Fue un honor junto a la propia Laura, Marcenia Baqués, Luis Luna, Eduardo Luis Feher y José Jorge Prado presentar un evento de tanta importancia, y en el que la interpretación de la actriz Isabel Pinar Roa volvio a ser magistral.
Laura iluminó Madrid con una poesía necesaria, una poesía que deberían poder leer todas las mujeres del país, una poesía que debería liberar las fantasías. Por el Círculo de Bellas Artes fluyó la energía de una tradición que iba de Sor Juana Inés de la Cruz a Jaime Sabines, pasando por Emilio Pacheco o Octavio Paz, entre otros y otras.
Como tuve ocasión de recordar, con ocasión del evento, la poesía de Laura está repleta de matices. Algunos versos de Laura son fósforos en la noche. De repente iluminan, enfocan, encienden la clara oscuridad del interior.
Laura lo consigue ya sea a través de la reflexión, cuando recordando a Eistein canta: "todo es relativo/ después rectifiqué/ Sí, todo.../ Menos lo que dejé de hacer/ a tiempo".
Ya sea a través del amor, como en descoyuntamiento: "nuestros sentimientos/ siguen siendo incontrolables", de manera sencilla, enérgica y sincera. En mi vida he recibido muchos abrazos pero algunos marcan más que otros. Con el abrazo de Laura, en Madrid, redescubrí la fuerza de la poesía capaz de sobreponerse a las circunstancias, radiante, serena, mágica.
Ojalá muchas mujeres lean los libros de Laura. Ya estoy ansioso porque pasen los meses y aparezca su próximo trabajo. Por suerte, volveremos a tenerla entre nosotros en Madrid y en Barcelona. Cuando sepa fechas os las confirmaré.
Sabines recordaba a Heráclito al citar: penoso es luchar con el corazón. Cada uno de nuestros deseos se compra al precio de nuestra alma. Laura canta en el poema cómo y porqué, del Aroma del deseo, una suerte de amor que anticipa: "a pesar/ de mi inteligencia". Os recomiendo la lectura del poema completo, así como de Gloria, o de poemas de Al calor de los sentidos como Hielo seco, la princesa rana, dulce remanso o con lo que sobre.
Para dar una pincelada reproduzco un breve poema de Laura, titulado "el hábito", del poemario "Al calor de los sentidos":
Cambiaste mi mundo de tal manera
que me siento confusa.
En vano trato de emular
tu calculada indiferencia
olvidando lo que tanto dices:
el hábito es más fuerte
que la propia conciencia.
Y quisiera despedirme con otro poema de Laura, "sin ti", de Al calor de los sentidos:
Hoy supe lo que significas para mí
tu ausencia me precipitó al vacío
a un mundo sin tacto, sin sabor,
sin aroma, sin luz, sin sonido.
Sólo me aturde
el ensordecedor silencio
del olvido.
Bendita Laura y benditas mujeres, hembras matriz del universo, capaces de cantar torrentes de sentimientos, que laten con perlas de pasión y pensamiento en el sabor de lo prohibido, el aroma del deseo y el calor de los sentidos.
En Laura el verbo es erótico, corporal y poético. Nos seduce, nos hechiza, nos desborda. Nos toca, nos acaricia, nos roza. Es una poesía de la piel, el corazón y el alma. Si aún no habéis sentido una iluminación así, buscadla, buscad la poesía de Laura, los versos del volcán, y decidme si:
¿os dejáis iluminar?
Como tuve ocasión de recordar, con ocasión del evento, la poesía de Laura está repleta de matices. Algunos versos de Laura son fósforos en la noche. De repente iluminan, enfocan, encienden la clara oscuridad del interior.
Laura lo consigue ya sea a través de la reflexión, cuando recordando a Eistein canta: "todo es relativo/ después rectifiqué/ Sí, todo.../ Menos lo que dejé de hacer/ a tiempo".
Ya sea a través del amor, como en descoyuntamiento: "nuestros sentimientos/ siguen siendo incontrolables", de manera sencilla, enérgica y sincera. En mi vida he recibido muchos abrazos pero algunos marcan más que otros. Con el abrazo de Laura, en Madrid, redescubrí la fuerza de la poesía capaz de sobreponerse a las circunstancias, radiante, serena, mágica.
Ojalá muchas mujeres lean los libros de Laura. Ya estoy ansioso porque pasen los meses y aparezca su próximo trabajo. Por suerte, volveremos a tenerla entre nosotros en Madrid y en Barcelona. Cuando sepa fechas os las confirmaré.
Sabines recordaba a Heráclito al citar: penoso es luchar con el corazón. Cada uno de nuestros deseos se compra al precio de nuestra alma. Laura canta en el poema cómo y porqué, del Aroma del deseo, una suerte de amor que anticipa: "a pesar/ de mi inteligencia". Os recomiendo la lectura del poema completo, así como de Gloria, o de poemas de Al calor de los sentidos como Hielo seco, la princesa rana, dulce remanso o con lo que sobre.
Para dar una pincelada reproduzco un breve poema de Laura, titulado "el hábito", del poemario "Al calor de los sentidos":
Cambiaste mi mundo de tal manera
que me siento confusa.
En vano trato de emular
tu calculada indiferencia
olvidando lo que tanto dices:
el hábito es más fuerte
que la propia conciencia.
Y quisiera despedirme con otro poema de Laura, "sin ti", de Al calor de los sentidos:
Hoy supe lo que significas para mí
tu ausencia me precipitó al vacío
a un mundo sin tacto, sin sabor,
sin aroma, sin luz, sin sonido.
Sólo me aturde
el ensordecedor silencio
del olvido.
Bendita Laura y benditas mujeres, hembras matriz del universo, capaces de cantar torrentes de sentimientos, que laten con perlas de pasión y pensamiento en el sabor de lo prohibido, el aroma del deseo y el calor de los sentidos.
En Laura el verbo es erótico, corporal y poético. Nos seduce, nos hechiza, nos desborda. Nos toca, nos acaricia, nos roza. Es una poesía de la piel, el corazón y el alma. Si aún no habéis sentido una iluminación así, buscadla, buscad la poesía de Laura, los versos del volcán, y decidme si:
¿os dejáis iluminar?
4 comentarios:
Buen hábito, que la poesía habite y por lo que escucho, acunada en buena matriz .Esperaremos ,que vuelva a dar a luz, ¿quien sabe?, aunque nos cueste el alma desearlo, si con la fortuna de saborearlo en directo, con palomitas de miradas.
Nuevamente, gracias por compartirlo…veo, que tu volcán sigue en activo, la luz se ve desde lejos , pero la sensación quema cerca je,je(barroquita forma de decir si).
Un abrazo.Paula
Me apunto a lo de "Bendita Laura y benditas mujeres..." Es todo un párrafo, sí señor.Y el resto desborda ilusión y sed colmadas ambas por haber podido compartir momentos. Hay mucha intensidad en lo que dices de manera que hay que leer a Laura, porque todo es cierto.
ojala muchas mujeres la lean... es todo un descubrimiento, redescubrimiento y pura magia;)
Los invito a visitar el Museo Chincolo:
http://www.museochincolo.org
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