sábado, 12 de septiembre de 2009

INSTANTE ZEN



Por Rubén García Cebollero

El domingo pasado supe que me han hecho escritor del mes en la revista Letras, de Fuengirola, página 26: http://www.alvaeno.com/letrasseptiembre.pdf


Lo curioso del caso es que EBRO 1938, la batalla de la tierra alta, no sale hasta octubre, y que hasta la fecha sólo han podido disfrutarla algunos críticos y algunas amistades.


Así que me sentí como el monje de la foto, pese a que no había ninguna luna tan hermosa ni ninguna montaña frente a mí, y recordé un proverbio zen:


Ir a la derecha o la izquierda es fácil,
ganar o ser vencido es fácil, también.
Pero no ganar ni ser vencido es muy difícil.


Dicen que el zen es un arte de iluminación espiritual. Dicen que un día donde soplaba un fuerte viento dos monjes discutían por un roble. El primero aseguraba que lo que se movía era el roble, y no el viento. El segundo negaba y sostenía que lo que se movía era el viento, y no el roble. Pasó un tercer monje por allí y les dijo: "Ni se mueve el roble ni se mueve el viento, se mueven vuestras mentes".


Así que la semana ha pasado como una ráfaga de viento, sin que pudiera asistir a la presentación de Fernando Iwasaki, que ha publicado con Páginas de Espuma, tal vez la mejor editorial de cuentos del país, el inclasificable libro "España, aparta de mí esos premios".


No sé si alcanzaré el Zen en el arte de escribir, del que hablaba Ray Bradbury, pero voy escribiendo;)


A fin de cuentas, como escribió Carloz Marzal en el 6 de Electrones, "escritor no es quien escribe para luego marcharse a vivir, sino quien no puede entender el hecho de vivir sin estar escribiendo".


Sea o no el escritor del mes, de un mes o de algún instante zen.)

1 comentario:

Beatriz dijo...

Felicidades de nuevo, Rubén, por partida doble. Habrá que estarse al loro. Has salido muy guapo en la foto, jeje!

Sé del especial aprecio que le tienes a Marzal, especialmente a sus 'Metales pesados', jaja! Aun así, pesado o no, reconozco que la suya es una buena definición del oficio de escribir, que por cierto, nada tiene que ver con publicar.

Nos vemos en esos instantes zen de cada día, Renfe mediante ;-)