martes, 26 de octubre de 2010

Teoría de las Sillas.


Por Ena Jenado
      
    “El triángulo, como todo el mundo sabe, es ese dibujito con tres rayas que dibujamos sobre los iconos de la divinidad cristiana. Simboliza la trascendencia, la sabiduría y la triple identidad disociativa de dicho ente todopoderoso: el triángulo esquizoide que sostiene el mundo.  Pero puestos a sostener, ¿no sería más lógico dibujar una silla sobre la divina melena? ¿No estaría el mundo mejor apoyado en una perfecta superfície cuadrada que en el vértice de un ángulo? ¿Acaso se insinúa que es más perfecto un triángulo que un cuadrado?  Tal vez incluso, podría proponerse una hamaca, un sillón orejero, un taburete. Tal vez dios sea la silla.” 

Hallándome inmerso y enajenado en tan elevadas disquisiciones, empezaba a vislumbrar en ellas la sencilla fórmula  unificadora que daría explicación al universo, validaría la Teoría de las Cuerdas y me propocionaría la receta definitiva del pastel de queso, cuando fui repentinamente asaltado por una revelación de calado cósmico  mucho más potente que las cuerdas: la Teoría de las Sillas.  No puedo sino trascribir la continuación el breve fragmento que mi memoria fue capaz de retener en ese momento de apolínea y cegadora revelación.

Establecido, pues, que el cosmos tiene, efectivamente, forma, silueta y sustancia de silla, es plausible colegir que la posición natural del ser humano es la sedente, pudiéndose clasificar ésta sustancia en la siguiente categorización sistémica:
SILLA ISÓSCELES, dícese de aquellas en la que sientan dos personas cuya discusión no tiene jamas fin, pues ambos creen poseer en igual medida la razón. Generalmente, ambos están equivocados. 

SILLA EQUILATERA, dícese de aquella en la que uno/a se siente alejado en igual medida de todos los se sientan a su alrededor. Es la más habitual en reuniones familiares y compromisos ineludibles. 

SILLA ESCALENA, dícese cuando el mueble en cuestión exige colocar la servilleta de papel bien dobladita bajo una de las patas. Del gr. skalenos: cojo. 

SILLA RECTÁNGULA, silla normal.

SILLA OBTUSÁNGULA, a la derecha de la normal.

SILLA ACUTÁNGULA, pues no, no va a la izquierda de la normal, listillo/a. 
SILLA METÁFORA, generalmente, única manera de explicar la realidad. Aplíquese al texto que se acaba de leer. O no.

5 comentarios:

Carso dijo...

Terry Pratchett imagina en sus novelas que el mundo tiene forma de disco sostenido por 4 elefantes a su vez sostenidos por una tortuga. los astozoólogos están preocupados por el sexo de la tortuga, ya que si en su vuelo cósmico se encuentra con una tortuga de sexo contrario es importante para la supervivencia de los habitantes del disco saber qué posición ocupara: encima o debajo. morirán aplastados o disfrutarán de una fantástica visión del lance?
con tu teoría de las sillas está claro que la tortuga buscará nuevas posturas.
que el triángulo esté con vosotros.

Unknown dijo...

Sí, qué risas con esas novelas de Mundodisco. Más vale que la tortuga esté bien cómoda, total, según Adams,la tierra será arrasada para construir una absurda autopista galáctica y el secreto del universo, la vida y la materia es 42, y no un simple triángulo. ¡Que el 42 os acompañe!

Mercè Mestre dijo...

Jo ara mateix et veig ficat en dues mogudes:

1) Associar-te amb el Gran Benet per escampar la teoria metafísica del triangle-cadira (butaca orelluda si pot ser) mentre els experts es dediquen a untar columnes modernistes, que ja és feina d'hores...

2) Anar de bolos amb El Tricicle ampliant "Sit" amb un nou sketch made in Carles (el Rull per suposat, no l'altre).

I la resta són metàfores...

Unknown dijo...

O bé associar-me amb el Tricicle i Sor Renun per a predicar la bona nova de les 42 cadires triangulars al 4,75% TAE sobre una tortuga. Segur que triomfavem. Tu ves donant idees.

Raquel Casas dijo...

Jaaaaaaaaaa!!

:)