martes, 22 de marzo de 2011

El Camp Nou se convierte en huerto urbano



La noticia habría resultado increíble a principios de siglo cuando Mourihno rogaba a Rossell entrenar al Barça B después de que le hubieran echado del Málaga. Messi se hacía con el decimo balón de plutonio y a Guardiola le había vuelto a crecer el pelo tras ganar su tercer mundial de clubes. Los directivos del club se planteaban hacer una nueva ampliación del estadio y cubrirlo con una impresionante bóveda cuyas estrellas serían los múltiples cracks de la historia del club. Todo el mundo conoce el dicho de ‘todo lo que sube baja’ y el Barça cayó en picado en la segunda vuelta del campeonato 2017. Si algo salvó la dignidad del club fue que su caída vino acompañada de la decadencia del fútbol como deporte y espectáculo. Un club americano formó los Globbers Trotter del fútbol con algunas estrellas europeas en sus últimos años de ejercicio. Lo que parecía una atracción inofensiva causó furor en los 8 continentes hasta el punto de eclipsar los partidos de liga profesionales. Una empresa del ocio con parques temáticos y centrales nucleares creó entonces la primera liga universal, una copia de los campeonatos de lucha libre donde el resultado está amañado y los luchadores salen al ring disfrazados con la única premisa de dar espectáculo. Pese a los vaticinios de fracaso la fórmula fue un éxito y las competiciones deportivas al uso se vinieron abajo.

Al mismo tiempo la burbuja inmobiliaria explotó por undécima vez y la celebridad de Barcelona como capital mundial de alguna cosa (Olimpiadas, Forums, fútbol, prostitución, etc.) se desvaneció frente a ciudades emergentes como Soria, Jaipur o Leverkusen. De repente el terreno del Camp Nou valía lo que vale un boniato y los impuestos eran tan elevados que el club quebró, cerró y lo abandonó a su suerte como un barco varado en las costas de Fuerteventura.

Pero todo esto es historia y la actualidad ofrece otra cara bien distinta. Un empleado nostálgico del club se negó a abandonar las ruinas del nuevo Colisseo y volvía de vez en cuando paseando entre las gradas que habían coreado el nombre de Romario, Shakira o tantos otros, fue así como descubrió el nacimiento de una petunia.

“Yo paseaba tranquilamente por el césped cuando vi sus pétalos. Lo primero que pensé fue que eso no habría pasado en los viejo tiempos, las máquinas no daban ocasión a que una brizna de hierba creciese por encima de las otras. El césped era regular e impecable de córner a córner. Después me fijé bien y vi que era una petunia, y no una petunia cualquiera, sino una Petunia Foliforme, familia lejana de la mítica Epirea Malva.”

El descubrimiento pudo haber pasado desapercibido, pero Eleuterio (el empleado del club) decidió aprovechar la circunstancia para plantar unas begonias. Al poco tiempo la noticia corría de boca en boca y otros vecinos vinieron a aprovecharse de los 55.000 metros cuadrados del campo. Lechugas, coles, berenjenas, incluso algún matojo de marihuana se ha plantado en el terreno que años atrás levantaban los tacos de Maradona, Puyol o Cantinflas.

El vecindario lo tiene claro: “antes no podíamos dormir cada noche de partido, ahora tenemos el huerto urbano más grande del mundo. ¡Y con riego automático!

Josep Maria Pujal, reportero de la ciudad condal

4 comentarios:

Beatriz dijo...

Jaja, Carso, quééééé buenooooo!!! Has erigido un monumento a las ruinas. A las de la civilización -por qué la llamarían así?- y a las de sus séquitos y acólitos.

Sin embargo, me queda una duda: alguien comprobó que los vegetales comestibles tales como las petunias y las begonias del camp nou no estuvieran irradiados? Tal vez los nuevos culés tendrán 3 cabezas en lugar de 1, o polidactilia en las manos y/o los pies -eso suponiendo que tengan manos y/o pies. Ahí está, todo un universo por explotar -y valga la redundancia.

Muaxs;)

Maurici dijo...

Cuidadín, cuidadín, que el gran Vázquez-Montalbán sempre comentava que amb les úniques coses que no s'hi ficava eren l'església i el Barça!

Per sort, parles de futbol i no de P&P...

Mercè Mestre dijo...

Sr. Pujal, estava esperant aquesta gran notícia des de 1965, any de la meva primera Primera Comunió (ja en porto 6), quan la meva il·lusió (sobredosi d'Aigua del Carme) era anar a collir lliris silvestres al Camp Nou per fer una ofrena a la Mare de Déu de l'Estany, patrona de la Carpa Salvatge, cosina tercera del Barbo Lampiño. També és casualitat...

Uf, quin descans, poder veure ara, en la meva sisena reencarnació, com el meu somni es fa realitat. Ja em puc morir tranquil·la.

Agraidíssima,

Alcaldessa d'Aldeaseñor, propera seu olímpica.

Carso dijo...

ostras sí, al paso que vamos serán radioactivos hasta los correos electrónicos. cuidadín!

per cert Maurici que els de la teva foto semblen anar amb l'uniforme antiradioactiu. fútbol? qui parla de fútbol? jo parlo de botànica urbana!

Mercè, segur que hem conicidit en alguna vida anterior, nedant a un estany (no radioactiu) i fent campanya pro olimpiadas en Aldeaseñor. ben vist, siiiii senyora.